En el mejor de los casos, sólo una de cada cuatro personas tiene acceso a un seguro; eso supone que tres cuartas partes de la población mundial quedan potencialmente desprotegidas frente a los riesgos cotidianos y las catástrofes naturales. Pero hay esperanza de cambiar esta situación y cerrar la brecha de protección.
Como se destacó en el artículo del boletín del mes pasado (el primero de los...