¿Hasta qué punto es crucial el elemento social de ESG para construir un futuro sostenible para los seguros inclusivos?
En los últimos años se ha puesto a prueba la estabilidad del mundo en más de un sentido, desde las continuas consecuencias del cambio climático hasta el impacto de la pandemia. Para muchos en el mundo occidental, los golpes devastadores de estos acontecimientos han sido amortiguados por el apoyo financiero, como los seguros y el acceso a los planes de permisos, lo que ha permitido a las empresas sobrevivir y a las economías crecer.
Sin embargo, la realidad ha sido totalmente diferente para las comunidades vulnerables de África, América Latina, los países emergentes de Asia y las zonas de Oriente Medio, donde la seguridad financiera es a menudo inaccesible, lo que impide que los hogares y las empresas de bajos ingresos puedan "recuperarse" o "reconstruir mejor".
Como se destacó durante nuestra reciente Reunión de Miembros de junio (JMM), hay muchas razones detrás de esta falta de apoyo financiero; desde la inestabilidad política, hasta la falta de confianza en los seguros y la falta de conocimiento de los productos, lo que tiene un impacto directo en la aceptación de los seguros.
Con el mundo en la cúspide de una crisis medioambiental, es crucial que las aseguradoras trabajen para cambiar estas actitudes y resultados, y se centren en cerrar esta brecha de protección de las personas. Para tener éxito, es necesario ofrecer un seguro sostenible e inclusivo, no sólo para garantizar la estabilidad financiera mundial, sino también para asegurar la estabilidad del sector.
Como subrayó Katharine Pulvermacher, Directora Ejecutiva de la MiN, durante la reciente mesa redonda de la ADA sobre Seguros sostenibles: un encuentro de dos mundos, celebrada en Luxemburgo a principios de este mes: "Los seguros son fundamentales para el crecimiento económico, el desarrollo y la estabilidad social. Las aseguradoras que apoyan activamente la inclusión financiera están asegurando el futuro de los seguros".
Una forma de lograr ese apoyo financiero global y la inclusión es que las aseguradoras incorporen normas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en sus operaciones comerciales. Para las aseguradoras, esto puede lograrse desarrollando productos de seguros accesibles y asequibles para los más vulnerables y con bajos ingresos, lo que se conoce como microseguros. Con una mayor aceptación de estos servicios, se protegen los ingresos y se estabiliza la clase media emergente, creando a su vez un mundo más sostenible y resistente.
El poder de las asociaciones
En los últimos meses, el impulso para llevar a cabo estas acciones ha sido objeto de una oleada de desarrollos e iniciativas en todo el sector asegurador mundial, todas ellas centradas en los aspectos sociales y sostenibles de los seguros.
La Alianza Mundial de Modelización de Riesgos (GRMA), lanzada en la Cumbre del Foro de Desarrollo del Seguro (FDI) en junio de 2022, es un ejemplo de ello. Creada por el FDI y V20, la GRMA pretende ayudar a los países vulnerables a acceder a la visión del riesgo climático y de catástrofes a través de plataformas de riesgo de código abierto, herramientas de gestión de riesgos, experiencia en financiación de riesgos operativos y datos. De este modo, estos países vulnerables pueden evaluar sus riesgos y poner en marcha las estrategias adecuadas que no solo les permitirán aumentar su resiliencia, sino que también les ayudarán a abordar su déficit de protección. Hasta la fecha, la GRMA ya está llevando a cabo acciones concretas sobre el terreno con su proyecto inaugural de protección contra las inundaciones en Ghana.
Otra asociación que está en el punto de mira -y que se debatió durante la sesión Looking Ahead durante nuestro JMM 2022- es la declaración del G7 para estructurar un escudo global contra el riesgo climático. Centrado en la creación de un sistema coherente y sistemático que garantice que las herramientas, como los sistemas de modelización, se aprovechan al máximo en beneficio de la población, el escudo global trata de conectar los esfuerzos locales con las iniciativas globales. Como comentó Ingrid-Gabriela Hoven, Directora General de la GIZ, los seguros inclusivos desempeñarán un papel importante dentro de este escudo global.
A pesar de proceder de diferentes sectores y organizaciones, todas estas iniciativas comparten un tema común: el trabajo conjunto. La importancia de esta colaboración es clave y no debe pasarse por alto. Como explicó otra ponente, Pratibha Thaker, de The Economist Intelligence Unit, "los mercados cambian de marcha cada día; el mundo no es Oriente y Occidente. Se trata de la globalización".
Una década de acción
Este enfoque de trabajo conjunto, al tiempo que se integra la ASG en el corazón de la toma de decisiones de las empresas, fue un punto central durante el evento de los Principios para la Sostenibilidad de los Seguros (PSI) liderado por la ONU y celebrado en Suiza el mes pasado, en el que miembros de la PSI de todo el mundo se reunieron para compartir sus ideas y acciones de lo que se ha acuñado como la Década de Acción de la ONU.
Marcando el tono del mundo en el que vivimos, Ken Ofori-Atta, Ministro de Finanzas de Ghana y presidente del V20, subrayó que sólo instigando la "innovación tecnológica y financiera" se puede "proteger a las empresas de futuros choques". Y, afortunadamente, parece que el sector asegurador mundial está escuchando.
Caesar J. M. Mwangi, director general de ICEA LION Insurance, por ejemplo, explicó cómo la Declaración de Nairobi sobre Seguros Sostenibles está animando a las aseguradoras africanas a comprometerse con las prácticas ASG, no sólo ofreciendo a las generaciones más jóvenes oportunidades de trabajo a largo plazo, sino animando a las personas, empresas y corporaciones a dejar de participar en proyectos que tienen un efecto perjudicial para el medio ambiente y el futuro del planeta.
Dyogo de Oliveira, Presidente de la CNseg, compartió otros ejemplos de cómo el sector está fomentando -y logrando- operaciones empresariales sostenibles, y explicó cómo el 60% de las aseguradoras de Brasil están integrando ahora la ASG en sus operaciones, siendo el más exitoso el despliegue de mapas de calor de riesgo climático, que revelan los impactos financieros que ciertos riesgos pueden tener en las empresas.
En Costa Rica, las pólizas de seguros están ayudando a allanar el camino para fortalecer la acción climática, como puede verse con el Protocolo de Conducta Empresarial Responsable del Sector Asegurador Costarricense, que pretende ayudar a las empresas a cumplir varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Más vale prevenir que curar
Sin embargo, uno de los resultados más innovadores de la conferencia de la ISP fue el lanzamiento de la guía Managing ESG Risks in Life and Health Insurance Business. Desarrollada con HSBC Life, la guía pretende ayudar a las aseguradoras de vida y salud a alinear su negocio y sus riesgos de suscripción con las normas ASG y los objetivos de sostenibilidad.
Comprensiblemente, con un aumento de la demanda de productos de vida y salud, la pandemia fue uno de los principales impulsores de la guía y, como señaló Moira Gill, Vicepresidenta Asociada de Medio Ambiente, Gobierno y Relaciones con la Industria de TD Insurance de Canadá, brindó una oportunidad de oro para mantener debates y crear conciencia sobre la mitigación de los riesgos sanitarios.
Además, Chad Park, Vicepresidente de Sostenibilidad y Ciudadanía del grupo The Co-operators de Canadá, explicó que, en la mayoría de los casos, las aseguradoras suscriben los factores, pero no examinan sus causas subyacentes. "Deberíamos pensar en qué intervenciones podrían realizar las aseguradoras para prevenir esos factores... y utilizar los conocimientos para ayudar a ampliar nuestra visión de las causas y los efectos de los seguros de salud y vida", dijo Park.
La guía hace mayor hincapié en los ODS desde el punto de vista de la vida y la salud, como el bienestar y la eliminación de la pobreza, y en cómo, a la hora de mitigar los riesgos sanitarios, la prevención es -a largo plazo- más barata y sostenible.
"Como tal, el valor de la guía es que ayuda a identificar y priorizar las metas, los objetivos y los factores ASG; pero lo más importante es que proporciona factores en los que hay que pensar, como el envejecimiento de la población, la contaminación del suelo y del agua, la neurodiversidad, la demografía, el estilo de vida y los factores emergentes", dijo Amita Chaudhury, Jefa de Grupo de Sostenibilidad de AIA.
Nuevos horizontes digitales
Como ponen de manifiesto estas asociaciones, iniciativas, publicaciones y proyectos globales, el sector de los seguros está avanzando en la dirección correcta cuando se trata de apoyar y crear un mundo más sostenible, pero en realidad necesitamos más velocidad.
Afortunadamente, el impulso de la digitalización en todos los aspectos del negocio de los seguros -un movimiento acelerado por la pandemia- ha abierto un mundo de oportunidades para ayudar a ofrecer productos más sostenibles. Éstas van desde las opciones ofrecidas a través de las redes de telefonía móvil y los servicios de comunicación por Internet, como WhatsApp, hasta el uso de aplicaciones digitales, que pueden resolver los problemas de identidad digital, seguridad y fiabilidad.
En esencia, nunca ha sido mejor momento para que las aseguradoras aprovechen las oportunidades que ofrece la revolución tecnológica, sin perder de vista la importancia del toque humano, para garantizar que los más vulnerables puedan finalmente acceder a esa red de seguridad financiera que necesitan.
Varias grandes aseguradoras, como Allianz, están utilizando la tecnología para distribuir productos. También están alentando activamente a las empresas individuales para que se apropien de las soluciones empresariales de microfinanciación, impartiendo educación financiera e invirtiendo en empresas de nueva creación destinadas a servir a esos países y comunidades que lo necesitan. Y su enfoque parece estar funcionando, con 62 millones de clientes emergentes que ahora tienen acceso a su propia red de seguridad financiera.
Pero el sector no puede conquistar esto por sí solo; para tener éxito necesita una combinación de un marco regulador adecuado que permita a las aseguradoras entrar en mercados nuevos y emergentes y que los microseguros figuren en la agenda política de los gobiernos de todo el mundo. En resumen, la aceptación política será importante para seguir facilitando el cambio.
Como resumió Katharine Pulvermacher, "para ser agentes del cambio tenemos que ser optimistas, obstinados, diplomáticos y respetados. Cada uno de nosotros tiene que asumir la responsabilidad de ayudar a crear esa confianza para que la gente pueda confiar en los seguros. Es hora de que las aseguradoras vuelvan a poner la S en ESG".