Como consumidores, confiamos en una serie, a veces desconcertante, de certificaciones y normas de garantía de calidad, desde el comercio justo hasta lo orgánico, desde la moda ética hasta la madera sostenible. Queremos estar seguros de que obtenemos una buena relación calidad-precio y un cierto nivel de calidad.
Sin embargo, cuando se trata de productos complejos, técnicamente sofisticados e intangibles como los seguros basados en índices, la evaluación de la calidad es mucho más difícil....